NTC ... 210. Noviembre 23, 2.005

NTC ... 210
Nos Topamos Con ... Año 5. Cali, Noviembre 23, 2.005.
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CONTENIDO
El diario del maestro Enrique Buenaventura por Fabio Martínez ///// FUNDACION VERSO A VERSO //// Los 10 libros del año (Semana) //// FICCION A LA MEDIDA, Arcadia propone … ///// “NUESTROS ÍDOLOS”, comentarios de Germán Patiño (Regalos de Navidad) y de Rafael Escobar De Andreis ////// EL ESPACIO PÚBLICO AUDIOVISUAL, El Malpensante , HJCK, cuasi epílogo ///// POESÍA Y MÚSICA LATINOAMERICANA # 207 en español y alemán ///// PRIMER CONCURSO DE FOTOGRAFÍA DEL ZOOLÓGICO DE CALI. GANADORES. EXPOSICION. //// ANIVERSARIO, Seguimos cabalgando, Sancho (SEMANA) ///// Pidámosle a la vida un barco … (“El cuento de LA ISLA DESCONOCIDA.” De Saramago)
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El diario del maestro Enrique Buenaventura
IMAGO , Fabio Martínez fabiomar@univalle.edu.co
El Tiempo, Cali 18 de diciembre de 2005
Hace dos años murió Enrique Buenaventura. Sin embargo, el vasto legado cultural que nos dejó, nos permite decir a su manera, que el maestro aún sigue vivo a la diestra de Dios padre.
A Enrique se le conoce en el país y en el exterior como dramaturgo y como hombre de teatro. Pero quizás solo sus compañeros de tablas y sus más cercanos amigos, saben que el maestro fue un artista integral, que recorrió casi la totalidad de las llamadas bellas artes.
Enrique sabía que la dramaturgia y el teatro son una rama importante de la literatura. Por esto, su primera incursión en el arte fue como cuentista y como poeta. En este camino por las letras, hizo amigos entrañables como Pablo Neruda, José María Arguedas y García Márquez.
Enrique sabía que para ser dramaturgo había que tener un espíritu renacentista, que le permitiera llevar a las tablas la comedia humana.
Como pintor, se dejó deslumbar por la luz y por los colores del trópico.
Como director de teatro, acostumbraba a llevar una bitácora donde diariamente pintaba bocetos y dibujaba las posibles escenas de sus piezas teatrales. Esta bitácora se convirtió con el tiempo en un diario de artista, a la manera de los diarios de Anais Nin o las cartas a Theo, éstas últimas firmadas por el angustiado de Van Gogh.
Pero a diferencia del diario de la autora norteamericana donde la escritora exterioriza sus múltiples relaciones sexuales o las cartas de Van Gogh donde se expresa la tragedia del ‘artista del hambre’, en el pequeño diario de Buenaventura, titulado Anti-íntimo, se percibe la agudeza y el humor de un hombre cultivado.
El libro Anti-íntimo, Opus 1 (me imagino que vendrán más), que estuvo bajo el cuidado editorial de Jaqueline Vidal, el fotógrafo Pedro Rey y Leo Cortés fue escrito por Buenaventura en forma epigramática, a la manera de los grandes filósofos, y tiene la virtud de ser, este sí, un libro de bolsillo.
Entre las perlas que encontré en este libro-miniatura, cito :
« Bienaventurados los que se creen originales, porque todos los plagios serán de ellos ».
« No hay nadie más ‘anormal’ que aquellas personas a las cuales todo le resulta normal ».
« No hay más aterrador que el temor a no poder superarse, a no superar su propio nivel. Es algo muchísimo más fuerte que el miedo a la vejez o a la muerte o, quizá, es lo mismo ».
« La amistad es una roca en medio del oleaje. Un arrecife donde se refugia el naúfrago. Es un albergue en la inclemencia de las tempestades ».
« Teatro, oficio de locos, diálogo con la vida ».
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Para esta Navidad 2.005, sugerencia:
FUNDACION VERSO A VERSO
http://www.musicalizando.com/f_verso_a_verso/index.htm
Y allí varias páginas sobre POESIA.
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LIBROS. Los 10 libros del año
Revista SEMANA , Edición: 1234 Fecha: 2005-12-16 , Sección: Especiales
Por: Luis Fernando Afanador, Crítico de libros
Revista SEMANA, Dic. 19, 2.005http://semana2.terra.com.co/archivo/articulosView.jsp?id=91924
Brillaron desde las resucitadas 'Crónicas de Narnia', hasta las novelas de William Ospina y Rubem Fonseca, sin olvidar los cuentos de Julian Barnes.
1 Espaldas mojadas, Alfredo Molano. El Áncora. Alfredo Molano, en su original estilo de mostrar los problemas sociales a través de testimonios, nos entrega otro libro doloroso e inquietante. Ya no se trata de campesinos expulsados por la violencia colombiana sino de los nuevos colonos globalizados: los 'espaldas mojadas', los que cruzan ilegalmente la frontera entre México y Estados Unidos.
2 El quebrantador, Edwidge Danticatt. Norma. Esta es una obra sobre la redención. Sobre la dificultad de reconstruir las vidas rotas que a su paso ha dejado un torturador y la dictadura de la cual hacía parte. No basta con el arrepentimiento ni con las amnistías: las acciones violentas tienen consecuencias, dejan huellas imborrables.
3 Cuentos y relatos de la literatura colombiana, Luz Mary Giraldo. Fondo de Cultura Económica. Esta antología constituye la más amplia selección de nuestra narrativa breve que se ha hecho hasta el presente: dos volúmenes de casi 1.000 páginas que comienzan con los mitos koguis y terminan con narradores nacidos en los años 70, es decir, una historia que supera los 500 años.
4 Genios, Harold Bloom. Norma. En una época que exalta la uniformidad y la mediocridad y en la que cualquiera puede llegar a ser escritor, resulta provocador y políticamente incorrecto revivir la discusión acerca del genio. Pues bien, eso es lo que hace el profesor Harold Bloom en su último libro: proponernos la lectura de 100 personajes que, desde Homero hasta Ralph Ellison, considera genios imprescindibles de la lengua.
5 El telón, Milan Kundera. Tusquets. Kundera retoma muchas de las tesis planteadas en El arte de la novela y Los testamentos traicionados. Las retoma y las desarrolla. O mejor aún: las afina, las expone con más claridad y precisión. Se trata de un bello ensayo que a veces llega a emocionar tanto como cualquiera de sus novelas.
6 Las crónicas de Narnia, C.S. Lewis. Planeta. Esta saga en siete tomos cuenta las aventuras de los hermanos Pavensie en Narnia, un lugar fantástico donde conviven seres humanos, animales parlantes y criaturas mitológicas, entreverados en la eterna lucha entre el bien y el mal, una de las obsesiones del profesor Lewis.
7 La mesa limón, Julián Barnes. Anagrama. Cada cuento es independiente y, sin embargo, a medida que avanzamos en la lectura, vamos descubriendo sus lazos comunes: son todas historias de vejez y muerte, duras historias que nos muestran lo difícil y doloroso que es el proceso de deterioro del cuerpo y de la mente.
8 Ursúa, William Ospina Alfaguara. Esta novela es más que el acercamiento a un personaje histórico. Con un lenguaje suntuoso -por momentos algo barroco- y un ritmo que no desfallece en ninguna de sus 471 páginas, Ospina muestra cómo eran estas tierras en el siglo XVI. Describe las mitologías, la geografía, las fundaciones y el saqueo de las culturas indígenas desde la costa atlántica hasta la sabana de Bogotá.
9 Diario de un libertino, Rubem Fonseca. Norma. Rubem Fonseca -un escritor que no obedece a las necesidades del mercado sino a sus propias obsesiones- en su última novela vuelve a insistir en una propuesta que sus fieles lectores ya conocen: hombres acosados por la ley que encuentran en el sexo y en la imaginación la única vía de escape.
10 Navegando por el mar de vino, Thomas Cahill. Norma. Este agudo ensayista irlandés nos recuerda que el legado griego en la cultura occidental es imborrable y abarca más disciplinas de las que creemos: el arte, la filosofía, la política, la religión, la lógica, la medicina y la física, entre otras.
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FICCION A LA MEDIDA
Arcadia propone a sus lectores una pequeña lista de títulos …
ARCADIA* Periodismo cultural. No. 3, Diciembre 19, 2.005. Editorial. arcadia@semana.com Directora: Marianne Ponsford. (Escaneó*: NTC …)
Resulta interesante que varias editoriales se hayan unido este diciembre para hacer una campaña que invita a la gente a Regalar tiempo de lectura. Es obvio que detrás de la Navidad hay intereses comerciales y que los escépticos miran con desdén a aquellos seres atiborrados de bolsas que corren como posesos en busca del último regalo a última hora. Sin embargo, como muchos aceptamos el pacto de poner bajo el arbolito algo para los que queremos, la propuesta de regalar libros es afortunada y el lema, interesante. Tiempo es una palabra poco comercial. La lectura requiere de horas, días, semanas, meses... Hay libros que nos persiguen por años y que se convierten en compañeros de viaje. Leer no es una obligación, ni nos hace mejores o peores. A lo mejor, ensancha horizontes y nos hace conscientes de que nuestros problemas no son únicos. Arcadia propone a sus lectores una pequeña lista de títulos para todos aquellos que quieran acercarse por primera vez a un libro. O para aquellos que, ante la espera interminable en un aeropuerto o en una terminal de transporte no encuentran qué hacer. Porque leer es una manera de ver correr el tiempo. Porque en las novelas, cuentos o poemas, está contenido el tiempo de la humanidad.
* Si usted quiere un libro de suspenso, lo que en inglés se conoce como page-turner, es decir, un libro que no pueda parar de leer (pero que, insistimos, son extraordinarios autores y no basura comercial), cuatro apuestas seguras que lo volverán adicto son: John Le Carre, Donna Leon, Sue Grafton o -nuestro preferido- Henning Manckell.
* Si usted es una mujer intelectualmente inquieta y quiere transportarse a otro mundo, atrévase con un novelón del siglo XIX. Puede ser Emma de Jane Austen o Middlemarch, de George Sand.
* Si quiere simplemente leer una brillante novela contemporánea, Expiación de Ian McEwan o Una música constante de Vikram Seth.
* Si usted es de las personas que no se atreve a entrar en librerías porque no sabría qué comprar entre tanta avalancha de títulos, el nombre de Stefan Zweig es perfecto para comenzar a leer. Tanto sus novelas (La piedad peligrosa, por ejemplo o La novela del ajedrez) como sus libros de no ficción (Momentos estelares de la humanidad o sus prodigiosas memorias El mundo de ayer) son altamente recomendados.
* Si usted quiere dejarse sorprender por un autor redescubierto recientemente, que a pesar de dejarse leer por un público amplio es altísima literatura, no dude en leer a Sandor Marai. La mujer justa o El último encuentro lo cautivarán.
* Si usted quiere reírse estas navidades, léase La conjura de los necios de John Kennedy Toole o La tía Julia y el escribidor de Mario Vargas Llosa (NoTiCa de NTC: http://www.puntodelectura.com/NASApp/puntodelectura/ficha.jsp?id=2548&genero=NARRATIVA Edición económica)
* Si usted está descubriendo que el tiempo pasa y que ya no es tan joven como antes (¿ a qué horas se fue la juventud?), lea Intimidad de Hanif Kureishi o El matrimonio amateur de Anne Tyler.
* Si usted quiere saldar una deuda con la literatura colombiana, compre La tejedora de coronas de Germán Espinosa, un clásico magnífico pero inexplicablemente poco leído.
* Si usted quiere leer cuentos porque no tiene mucho tiempo disponible, dos maestros del género son Joyce Carol Oates (Pequeñas avalanchas) y James Thurber (La vida secreta de Walter Mitty).
* Si quiere leer una novela excéntrica y fascinante, algo que lo descentre, muy extraño pero también muy seductor, El curioso incidente del perro a medianoche, de Mark Haddon, que ha dejado asombrado a un público muy amplio, es nuestro "raro" preferido.
* Si tiene hijos pequeños (entre tres y seis años), los aficionará a la lectura con libros de Anthony Browne, David McKee o Chris Van Allsburgh.
* Si su hijo está atravesando una adolescencia insufrible y se rebela contra todo, déjele El guardián en el centeno de J. D. Salinger en la mesa de noche. Quedará estupefacto.
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* NoTiCas … de NTC …: ARCADIA (Periodismo cultural) aún no tiene pagina en Internet. Ojalá pronto la tenga. Publicarla sólo impresa (33 paginas) limita enormemente la difusión de su excelente y variado contenido. Por ser una publicación de Semana, de este número 3 de Arcadia apareció en el portal de esta revista (celebramos este primer pasito a la Internet) el texto de la portada: Una tradición latinoamericana: ¿Diplomacia para escritores? Con el nombramiento de Santiago Gamboa ante la Unesco en París, se abre la pregunta sobre si los escritores deben trabajar para un gobierno. Las voces están encontradas: ¿se puede conservar la independencia intelectual? Por Nicolás Ordóñez Carrillo* http://semana2.terra.com.co/opencms/opencms/Semana/articulo.html?id=92049 (Allí además la portada de Arcadia.)
Y allí, o por su correo-e arcadia@semana.com , abrió un foro para proponer nuevos caminos para el debate: ¿Cree usted que los escritores deben ser diplomáticos?
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A Regalos de Navidad
Al margen. Por: Germán Patiño
EL PAIS. Diciembre 19 de 2005 http://elpais-cali.terra.com.co/historico/dic192005/OPN/margen.html
Desde luego, un buen electrodoméstico siempre será apreciado. Pero resulta mejor, más perdurable, y también más personal, regalar libros o discos. A continuación algunos recomendados:
Nuestros ídolos, de Julio César Londoño. Con las buenas maneras de periodismo literario, Londoño nos entrega una colección exquisita de perfiles, en los que se destaca el interés por las singularidades del biografiado y las, en ocasiones cínicas, las más de las veces irónicas, opiniones del autor. Lectura cautivante, que no desdice de los maestros del género: aquí está Capote con su Marilyn Monroe, Wolfe con sus obreros de la construcción y García Márquez con su retrato de Ramón Hoyos, el campeón de ciclismo. Pero con el sello de Londoño. (Notica de NTC : el libro en http://www.norma.com/libro.asp?int_divi=1&idlibro=30140)
El japonés que amó la María, de Gonzalo España. Novela histórica de alto vuelo, teñida de humor, que cabalga entre el relato de viajes y la ficción de aventuras. De importancia en nuestras letras porque es una primera aproximación afortunada al mundo convulsionado de las guerras civiles del Siglo XIX colombiano (hay muchas novelas malas sobre el tema). El grupo de soldados liberales abandonados por sus comandantes en un recodo del río Magdalena está destinado a permanecer en la memoria del lector.
Compra un caballo en Estambul, de Fernando Calero de la Pava. Para quien no crea que con la literatura se puede alucinar. Un recorrido frenético por la vida contemporánea. Algo así como la música del grupo punk ‘Ramones’ traducida a prosa. Aunque se ha convertido en un objeto de culto para los lectores jóvenes, en realidad éstos no debieran aproximarse a él “sin la compañía de un adulto responsable” como reza el ingenuo consejo de la televisión.
Monte Frío, de Charles Frazier. Publicada hace algunos años en Estados Unidos, demuestra que el romanticismo, antes que una escuela estética es una actitud frente a la vida, que se puede manifestar en cualquier época y lugar. Una incursión a lo Whitman en lo profundo de América del Norte. Vasta, honda, vital y, en ocasiones, estremecedora.Una de las grandes novelas escritas en la última década.
Pura chonta, de Hugo Candelario González y Bahía Trío. El mejor trabajo de la música popular colombiana en el año que termina. Y con pocos antecedentes. Habría que remontarse a Pacho Galán cuando grabó ‘Atlántico’ para encontrar algo de calidad similar. Música moderna, enraizada en la tradición, virtuosamente interpretada. Un banquete musical, en opinión de Gloria Triana.
El poeta del valle del Sinú, de Alé Kumá. La música de Pablo Flórez interpretada con gusto impecable y buen concepto. Porros, cumbias y paseos sinuanos en el formato contemporáneo de este sobresaliente grupo musical, que ya nos había entregado la maravilla de ‘Cantaoras’. Un disco hecho con ganas, según expresión de mi joven amiga Isabel Nieves.
El problema con esta lista es que los discos están pésimamente distribuidos, lo mismo que la novela de España, y será difícil conseguirlos. Y no sé si Monte Frío, publicada en su versión castellana por editorial Lumen, se encuentre en las librerías.
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“NUESTROS ÍDOLOS”
Por: Rafael Escobar De Andreis* raeda@telesat.com.co
Gracias al autor por el envío del texto:
(Notica de NTC : el libro en http://www.norma.com/libro.asp?int_divi=1&idlibro=30140)
Por no sentirme involucrado entre la gran mayoría del pueblo colombiano que según Julio César Londoño admira y venera a esos personajes que retrata en su libro y entre los cuales hay algunos libres de toda sospecha, levanto la voz en defensa de las minorías, que no deben ser pocas, y al mismo tiempo me declaro en contra de los que tratan de medir a todos con el mismo rasero, pasando por alto que somos distintos, con particularidades en la concepción del mundo y que precisamente tales características deberían ser una de las premisas que sustentan lo que debe ser una democracia real y no una caricatura de tal, que es lo que tenemos.
Encabeza el libro : “ALVARO URIBE entre la historia y el mito” y sólo a este me refiero porque como digo hay unos pocos libres de toda sospecha y otros que no me suscitan comentarios. En cambio Julio César ha querido que éste no sólo encabece la lista sino que sea elevado a la categoría de un mito.
Ya en el título se encuentra una falsa disyuntiva pues así como está expresado significa que la historia es lo real y el mito lo irreal o lo fantástico. Es decir toma la palabra mito en una de las connotaciones que aparece en el diccionario: “Cosa inventada por alguien, que intenta hacerla pasar por verdad o cosa que no existe más que en la fantasía de alguien” María Moliner, Diccionario de uso del Español. No niego pues que sea castizo pero supongo que en un escrito serio y de un autor que se recrea en las exactas matemáticas, uno esperaría que por lo menos fuera más estricto en sus conceptos y aclarara por lo menos, en cada afirmación, qué significado de mito utiliza en cada caso. Esto lo digo por una contradicción que más adelante señalo.
MITO, según Mircea Eliade, una de las autoridades en este tema y en el de las religiones dice: «el mito cuenta una historia sagrada; relata un acontecimiento que ha tenido lugar en un tiempo primordial, el tiempo fabuloso de los “comienzos”» Y en otro aparte: «Es pues siempre (el mito) el relato de una “creación”» Más adelante: «El mito se considera como una historia sagrada y, por tanto, una “historia verdadera”, puesto que se refiere siempre a realidades» Que me explique entonces el autor, soy un poco lento en comprender, ¿cómo así que Alvaro Uribe está “entre la historia y el mito”? y ¿cómo así que “estamos ante el nacimiento de un mito que hará palidecer las efigies de Galán...”
Según Londoño, Uribe “alterna el lenguaje coloquial y los regaños paternalistas con las cifras y los análisis propios de un hombre de Estado” Sinceramente no discuto que pueda estar rodeado por personas conocedoras del tema pero nunca le he escuchado al presidente una disertación económica o política ni de bajo ni de alto nivel y si es tan versado en el tema ¿por qué –se preguntaría el más ignorante- gobierna al país “como un mandatario de comienzos del siglo pasado”?
Parece que el sombrerito de campesino y el poncho han engañado a muchos que lo ven en las tragedias besando muchachitas y consolando viudas. ¿Acaso no es esta la actitud de cualquier político en campaña? Esto contradice lo de que “el manejo de su imagen ha sido impecable”, así como también el incidente del frac que malestrenó en Madrid y su lenguaje campechano que nos deja siempre mal parados en el exterior.
Más allá de sus deseos inconfesables quisiera preguntarle al autor del libro ¿cómo explica que a Uribe, “su amado pueblo” le haya tumbado el referendo? Si él le da una favorabilidad del 80% y además “tiene hipnotizados a los colombianos”
Julio César Londoño visualiza a Uribe, de no mediar las circunstancias actuales, haciendo versos. Quizá haciendo versos porque no vería como poeta ni en otra rama del arte a quien está convencido de su propia verdad y que maneja un país sin poner la más mínima atención a otras opiniones que no sean las suyas. Dice José Luis Piqueros: «De ahí la poesía, que indaga sin rigor metodológico, que plantea preguntas a sabiendas de que no existen respuestas; que se mueve a ciegas y sólo alcanza a iluminar muy fugazmente una pequeña porción de realidad. Aunque, a veces, esa pequeña porción de realidad sea suficiente para seguir viviendo». Quien se considera el único, el mesías, no creo que pueda ponerse en cuestión a sí mismo, ni hacerse preguntas, ni espere de los demás sino adoración y actitudes sumisas. No es un mito es un ídolo que es algo muy diferente. En cuanto a Uribe reconozco un acierto el nombre del libro: Nuestros ídolos.
Sobre lo del autoritarismo del presidente, representado por él mismo en múltiples ocasiones y siempre con música de pataletas, quiero prevenir a los incautos con estas palabras de Erich Fried:
De quien te dice: tengo miedo,
no dudes.
De quien te dice que no duda,
ten miedo.
No entiendo tampoco como quien “corre el riesgo de convertirse él mismo en una caricatura de todo lo que ha criticado” lleve al autor a decir que “estamos ante el nacimiento de un mito...” Sólo podría entenderlo si asumo que, otra vez el autor, toma la palabra mito como sinónimo de irrealidad, de ficción, de algo inventado, de una mentira. Pero como él ha querido es engrandecerlo con esta afirmación y así lo hemos visto a través del escrito, entonces es obligatorio preguntarse ¿en qué quedamos? ¿a cuál definición de mito se acoge esta vez?
Según Londoño los mitos sirven : o “para darle un ropaje poético a las mentiras más burdas o para proporcionar las metáforas que nos ayudan a descifrar la realidad”. Y él quiere que en el caso de Uribe sirva para lo segundo.
Pero Mircea Eliade, ya citado, en su libro Mito y realidad dice que “la función principal del mito es revelar los modelos ejemplares de todos los ritos y actividades humanas significativas: tanto la alimentación o el matrimonio como el trabajo, la educación, el arte o la sabiduría”.
Y lo cito una vez más para que no quede duda: “Lo esencial para él (el hombre arcaico) es pues, conocer los mitos. No sólo porque los mitos le ofrecen una explicación del Mundo y de su propio modo de existir en el mundo, sino sobre todo, porque al rememorarlos, al reactualizarlos, es capaz de repetir lo que los Dioses, los Héroes o los antepasados hicieron ab origine”.
Sobre las espaldas de este presidente, que más que “contradictorio” me parece en muchas de sus actuaciones un mimo que ensaya su papel, Londoño espera “Ojalá” o sea “quiera Alá” , que concurran las voluntades para que llegue “a buen puerto el proceso de la tantas veces aplazada reconstrucción nacional”.
No pongo en duda por un instante que Julio César Londoño desea que tengamos un país mejor pero le sugiero que así sea en el plano de las utopías se una a un candidato verdaderamente estadista, no autoritario, menos arrodillado a los dictados de Bush y capaz de tener en cuenta otras concepciones del mundo.
Si el escrito todo con relación a Uribe no es sino una suculenta ironía, tendría que reconocer que me equivoqué y me tocaría decirle a Julio César: ¡Salud!
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EL ESPACIO PÚBLICO AUDIOVISUAL
De: El Malpensante [ editorial@elmalpensante.com ]
Enviado el: Jueves, 22 de Diciembre de 2005 02:52 p.m.
Para: NTC … y lista-e de EL MALPENSANTE
Asunto: HJCK, cuasi epílogo
Estimados amigos y amigas, Abajo les copio el editorial, exótico para El Malpensante, que incluimos en la última edición. Tiene que ver con el tema de la HJCK por el que ustedes expresaron interés. Un saludo, Andrés Hoyos, Director
EL ESPACIO PÚBLICO AUDIOVISUAL
El lunes 21 de noviembre por fin salió del aire la emisora HJCK en Bogotá. En su lugar ahora se encuentra algo que desde luego no contará con mi audiencia, pues a partir de ese día los 89.9 del FM quedaron borrados de mi dial para siempre, y no dudo que muchas personas procedieron y procederán igual que yo. Se consumó así el zarpazo gratuito que el Grupo Prisa y sus ejecutivos locales quisieron darle a la cultura de la ciudad y del país. En retrospectiva, hay que enfatizar que tuvieron la oportunidad de portarse con altura y de tratarnos como si fuéramos un país culto y civilizado, pero que optaron por la despiadada lógica de los centavos, ganándose una mancha en su trayectoria en Colombia, antes apreciable, que sin duda afectará en forma negativa los nuevos proyectos que quieran emprender de aquí en adelante entre nosotros. No todo, sin embargo, es negativo; quedan varias lecciones que deberán servirnos y que ameritan este raro editorial en una revista sin editoriales.
Durante la campaña para mantener la emisora en el aire se ventiló la idea de que sacrificios como éstos son los gajes de vivir en una economía de mercado, de modo que bien podemos empezar por ocuparnos de ese tema. Recordarán quienes tengan 50 años, o más, cómo en las décadas de los sesenta y setenta circulaban por el mundo universitario y por amplios sectores intelectuales del país, con no poco prestigio, unas teorías algo caóticas que insistían en que era preferible el socialismo radical al cruel capitalismo imperante. Examinadas luego estas teorías a la luz de lo acontecido en Euro¬pa Oriental y en Asia, para no hablar de los lamentables experimentos de Cuba y Nicaragua, resultó que el remedio prescrito era mucho peor que la enfermedad, y la siguiente generación dejó de lado las militancias radicales y los interminables debates ideológicos, para vivir apenas el doloroso coletazo de una utopía degenerada que desde entonces nos viene anegando en olas sucesivas de vandalismo y de terror. Ya no quedan, pues, muchas dudas de que conviene vivir en una economía de mercado, pero de ahí no se sigue, como tal vez piensa cualquier vicepresidente de Caracol Radio, que la mano invisible lo resolverá todo a satisfacción, ni que los desequilibrios detectados entonces, y en su mayoría persistentes hoy, sean una invención de mentes calenturientas o constituyan un problema menor. El mercado, ciego por definición, es incapaz de generar por sí solo una convivencia civilizada y regida por la ética. Así, no sólo sucede que por razones de desalmada contabilidad una prestigiosa empresa española arrasa con una emisora emblemática de la cultura en Bogotá, como la HJCK, sino que si mañana volviere a ser legal traficar con seres humanos, de algún lugar aparecerían los inversionistas necesarios para aprovechar la oportunidad de negocio. De hecho, en Colombia hemos sido víctimas de unos “empresarios” criminales y asesinos que se han dedicado, con gran éxito y sevicia, a satisfacer la insaciable demanda de drogas psicotrópicas que hay en el Primer Mundo.
Al mercado, pues, hay que ponerle reglas y límites claros —ojalá también prácticos e inteligentes—, y entre estas reglas y esos límites en Colombia estamos en mora de definir de una vez por todas los que atañen a los bienes culturales que no pueden ser destruidos por el plumazo autoritario del presidente de una compañía privada, por rica y prestigiosa que se crea. Una analogía nos orientará a la hora de abordar el tema, pues así como existe el espacio público físico, representado por plazas, parques, alamedas, ciclorrutas, andenes y demás bienes muebles e inmuebles que se deben preservar, sin duda también existe un espacio público en el espectro electromagnético. Y siguiendo con la analogía, si ya nos estamos acostumbrando a que en las ciudades y campos debe primar lo público sobre lo privado, en el espectro electromagnético la situación no tiene por qué ser diferente. Los grandes medios audiovisuales, que silenciaron la campaña por salvar a la HJCK con una unanimidad de sospechoso regusto oligopólico, nos tienen convencidos de que su destino es equivalente al del país y que por lo tanto la sociedad debe permitirles desarrollar y rentabilizar hasta el último rincón del espectro, so pena de vernos condenados al eterno subdesarrollo. Pero no hay tal, porque así como la población rechaza la conversión de un parque público en un edificio de apartamentos y porque así como no es indispensable para el desarrollo de una ciudad urbanizar hasta el último confín del espacio público, tampoco es esencial para el progreso del país que en el uso del espectro electromagnético la rentabilidad sea el único criterio a tener en cuenta. Antes al contrario, el Estado debe garantizar que en esta vertiente del espacio público, al igual que en la física, el interés público prime sobre el privado, y si esto implica limitar las opciones de negocios de los grandes grupos de medios, pues que así sea. Queda visto, entre otras cosas, que cuando se les pide que no estrangulen la cultura y que nos den variedad de programas y de enfoques, así las audiencias para ciertos temas no sean las máximas, ellos una vez y otra se niegan a hacerlo.
Una forma de entender nuestro atraso sería decir que Colombia ha sufrido de una omisión crónica en la solución de buena parte de sus problemas cruciales. Pues bien, en el espacio audiovisual hoy maltratado por la comercialización a ultranza son muchas las visiones de mundo y las opciones de convivencia que se podrían plantear y que no se plantean. Y la lástima grande es que el Estado, con mínimas excepciones, tampoco ha sabido generar una oferta cultural en radio y televisión que pueda mencionarse sin vergüenza. No suele haber en los espacios estatales continuidad, ni calidad, ni inversión, como si al mencionar la palabra cultura el alto funcionario de turno se la figurara siempre vestida de harapos. La conclusión más o menos evidente es que el Estado colombiano, emproblemado y mal financiado como está, tampoco debe volverse productor de cultura, sino que debe dejar que funcionen esquemas mixtos, garantizando los espacios, las reglas y los dineros suficientes para llenarlos con altura, pero sin proveer los contenidos. Eso sí, una vez algo haya demostrado calidad y permanencia en la estima del público, como lo demostró la HJCK a lo largo de 55 años al aire, ese algo puede ser modernizado y remodelado pero no debe ser destruido, pues habrá entrado a ser parte del patrimonio colectivo.
Este editorial debe detenerse aquí, ya que nosotros tampoco tenemos respuestas hechas y derechas que se puedan aplicar al pie de la letra al problema planteado. Nos interesan las opiniones que desarrollen lo dicho o que lo contradigan en todo o en parte. De cualquier modo, no podemos esperar hasta que ya no quede espacio público electromagnético para reaccionar a la monotonía y mediocridad de lo que allí se ve y se oye. Tenemos que hacerlo desde ahora cuando todavía hay posibilidades de enderezar, al menos en parte, lo torcido.
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Poesía y Música Latinoamericana
De: YAGE AUSTRIA [ yage.austria@euroyage.net ]
Enviado el: Miércoles, 21 de Diciembre de 2005 04:10 a.m.
Para: Lista de correo-e de Yage
Asunto: Poesía y Música Latinoamericana # 207
Queridas amigas, queridos amigos:
El próximo domingo 25 de diciembre del 2005 presentaremos en la Radiofabrik Salzburg (107.5 FM), entre las 19:06 y las 20:00 horas (hora de Austria!), música del compositor mexicano Gabriel Pareyón. Las poesías que leeremos pertenecen a Lucas Duarte (Colombia) y la música de fondo será de Pedro Nel Martínez (Colombia); todo ésto en nuestro programa Poesía y Música Latinoamericana, en español y alemán. ¡Les deseamos una feliz audición! ATENCIÓN: El programa Poesía y Música Latinoamericana se puede escuchar online en el sitio www.radiofabrik.at (Link MP3 Live-Stream) !!!! Tengan por favor en cuenta la diferencia horaria con Austria!!!!
REPETICIÓN: ¡La audición del programa Poesía y Música Latinoamericana se repite todos los jueves entre las 10:06 y las 11:00 horas (de Austria!), en la Radiofabrik de Salzburgo!
Cordial saludo! YAGE, Verein für lat. Kunst, Wissenschaft und Kultur. www.euroyage.com AUSTRIA
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PRIMER CONCURSO DE FOTOGRAFÍA
“MIS RECUERDOS DEL ZOOLÓGICO”.
GANADORES. EXPOSICION. 29 de Dic., 5:00 PM, Zoológico de Cali.
Apreciados participantes del 1er concurso de Fotografía “Mis recuerdos del Zoológico”.
Ante todo queremos agradecerles haber participado y aportado a este concurso con fotografías por demás especiales. Les contamos que hemos recibido 500 fotografías por lo que ha sido un trabajo muy complicado de seleccionar.
Finalmente el jurado conformado por Micky Calero (fotógrafo profesional) Roberto Caro (Director Creativo del Bando Creativo), José Kattan (fotógrafo profesional), Héctor Chavarro Morales (Casa Color), Alberto López (Casa Color) y María Clara Domínguez (Directora Fundación Zoológica de Cali) dictaminó los siguientes ganadores:
Primer premio
Nombre del autor: Julián Velásquez , Nombre de la foto: Anónima
Segundo premio
Nombre del autor: Leonardo Herrera Nombre de la foto: Abrazo
Tercer premio (premio compartido) Nombre del autor: Gabriel Ruiz Nombre de la foto: Jardines florecidos Nombre del autor: Maria Isabel Casas Nombre de la foto: Verdes en el camino
Primera mención especial (compartida)
Nombre del autor: Julián Velásquez Nombre de la foto: Nutria Nombre de la foto: Rey de gallinazo
Segunda mención especial Nombre del autor: Juan Carlos Velásquez Nombre de la foto: Si sólo tuviera unas alas
Tercera mención especial Nombre del autor: Victoria Eugenia Holguín Nombre de la foto: Escamoso
La premiación e inauguración de la exposición de las fotos seleccionadas será el día 29 de Diciembre a las 5:00 PM en el Zoológico de Cali. Los esperamos entonces para compartir con ustedes y recibir el 2006 con mucha energía.
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ANIVERSARIO
Seguimos cabalgando, Sancho
SEMANA, Dic. 19, 2.005
http://semana2.terra.com.co/opencms/opencms/Semana/articulo.html?id=91955
La obra cumbre de Miguel de Cervantes, 'El Quijote', parece renacer. El 2005 fue su año, se vendieron millones de ejemplares en todo el mundo; 55.000 de ellos en Colombia.
Por Luis Fernando Afanador
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Pidámosle a la vida un barco ...

Resumiendo, parodiando y parafraseando al incomparable Saramago

Como locos de atar,
con manías de navegaciones,
de acuerdo con la prográmatica de las puertas,
pidámosle a la vida un barco, una carabela,
para buscar, con las fuerzas interior y del viento, una isla desconocida,
solo una, porque es imposible que no exista una isla desconocida.

Tendremos la carabela,
además –cosas del destino, de la sincronía universal-
una mujer, decidirá seguirnos, acompañarnos.
Aprenderemos con los maestros verdaderos,
el mar, el barco, el cielo, Sí, El cielo, los vientos, las nubes,
quien va al mar se avía en la tierra.
No merece la pena preocuparnos tanto,
Hay mucho más que ver, todo no es igual.

Antes de zarpar, habrá que soñar,
Luego, en el primer atraque, en tierra habitada, contemplar, en silencio,
la desbandada de aquellos no-marineros (sus mujeres, los animales, las gaviotas)
que nos engañaron y que desde el principio no creyeron en la isla desconocida ...,
esperar la rotura y derrame de los sacos de tierra, un poco más de lluvia,
esperar que las raíces de los árboles penetren en el armazón del barco,
que el viento sople en sus copas y vaya encaminando la carabela a su destino,
que ella sea un bosque navegante,
un bosque en donde comiencen a cantar los pájaros que estaban escondidos por ahí.
Despertarnos abrazados a la mujer, confundidos los cuerpos, confundidas las literas.
Después apenas el sol acabe de nacer, pintar, en blancas letras, la proa del barco.
Poner el nombre a la carabela.

Y hacia la hora del medio día, con la marea,
“La Isla Desconocida”, se hizo a la mar, a la búsqueda de sí misma.

Todo hombre es una isla, es necesario salir de la isla para ver la isla.
Si no sales de ti, no llegas a saber quién eres.
No nos vemos si no salimos de nosotros, si no salimos de nosotros mismos.

Alquimio Tarabitar W., Marzo 28 de 1999.
Con todo respeto, resumiendo, parodiando y parafraseando al incomparable Saramago en “El cuento de LA ISLA DESCONOCIDA.”
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* NoTiCas … de NTC …: El cuento de Saramago se encuentra completo, gratis, en http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/por/saramago/cuentode.htm . Hay una edición económica de la editorial Punto de Lectura* http://www.puntodelectura.com , con una bellísima carátula, que se consigue Tower Records TR de Chipichape. (Hay unos muchos otros libros interesantes de esta editorial y de otras en TR)
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* El cuento de la isla desconocida . Saramago , José
http://www.puntodelectura.com/NASApp/puntodelectura/ficha.jsp?id=250&genero=NARRATIVA (allí carátula**) : Un suceso histórico, la intención de un noble portugués de ser autorizado por el rey para utilizar una de sus carabelas en la búsqueda de la isla desconocida, le sirve al autor de pretexto para realizar una fábula descarnada del hombre moderno.
"...un dulce y sutil cuento sobre el amor y la búsqueda de la identidad personal".
The Washington Post Book World
Saramago nos muestra que soñar, a veces, es el verdadero camino hacia la felicidad.

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